Es común escuchar, especialmente en sectores cristianos, que “la Torah/Ley está abolida y no debemos observarla”; que “Jesús abolió la Ley en la cruz”(expresion que esta en los labios de los cristianos). No es extraño escuchar la famosa frase: “Ya no estamos bajo la Ley; estamos bajo la gracia...”. Sin embargo, ¿comprenderán estas personas lo que realmente significa la palabra gracia, y qué es realmente estar bajo la gracia?
Diferenciando los términos
Tal vez uno de los malentendidos más perpetuados en muchos sectores cristianos es el creer que los conceptos "vajesed y rajem" (gracia y misericordia) son casi sinónimos. No es extraño escuchar personas a nuestro alrededor decir: “Por su gracia y misericordia estamos vivos” u otras expresiones similares, casi dando a entender como si la gracia y la misericordia fueran básicamente lo mismo.
Por lo general, muchos creyentes ven la gracia
como una licencia para pecar, sabiendo que en última instancia siempre
tendrán el perdón del Abba/Padre que, según su entendimiento, cancela toda la
Torah/Ley en
contra de ellos. En base a este erróneo concepto se han elaborado
teorías y pensamientos que han hecho creer a muchos en un “perdón
eterno” del Abba/Padre no importando lo que hagan o dejen de hacer. Ésto es
comúnmente perpetuado en sectores donde se enseña que la Torah (común y
erróneamente traducida como Ley) está abolida y no hay porqué honrarla. Sin embargo, un entendimiento más claro sobre lo que realmente significa la palabra vajesed/gracia y cómo se diferencia de la rajem/misericordia derriba fácilmente este erróneo concepto, permitiendo una comprensión y distinción clara de estos términos.
El término misericordia (en ivri/hebreo, רחמים rajem)
se define como “una actitud bondadosa de compasión hacia otro,
generalmente del ofendido hacia el ofensor o desde el más afortunado
hacia el más necesitado.” Es interesante notar que el término ivri/hebreo para rajem/misericordia está en plural, lo cual es muy preciso, pues la misma Escritura nos declara que sus rajemim/misericordias son
nuevas cada mañana (Lamentaciones 3:23). Ahora bien, cuando se habla de
la rajem/misericordia de Yahweh, se refiere a el perdón que el Todopoderoso
otorga como resultado de un arrepentimiento sincero. El recibir el
perdón del Abba/Padre implica que demos la espalda al pecado, cambiemos la
dirección de nuestras vidas y escojamos vivir de acuerdo a su Davar/Palabra.
Para
poder recibir el perdón, debemos saber cual ha sido nuestra
transgresión. ¿Y cómo sabemos éso? La Kitbé/Escritura nos dice: “...el pecado
es infracción de la Torah/ley.” Yonahan Alef/1 Juan 3:4 (VIN). Sin embargo, es precisamente
aquí donde encontramos una de las grandes contradicciones en las
enseñanzas del cristianismo. Si, según ellos, la Torah (comúnmente
llamada y traducida como Ley)
está abolida, entonces ¿qué nos describe el pecado? Es como si el
gobierno, de repente, decidiera abolir la ley de tránsito, y un buen día
un guardia nos detuviera para darnos un boleto por conducir nuestro
auto en exceso de velocidad. ¿Haría sentido? ¡Pues no! Sin no existe la
ley de tránsito, el guardia no nos puede dar un boleto, pues no hay
infracción. De la misma manera, si la Torah (Ley) está abolida, ¿cómo
Yonahan/Juan nos dice que el pecado es infracción de la Torah (Ley)?
Muchos dirán que la palabra ley aquí no se refiere a la Torah, pero lo cierto es que es una alusión directa a ésta. En este verso, la palabra traducida como ley es la palabra griega ανομια anomia, la cual significa “violación a la ley” y hace referencia directa a la Torah (recordemos que el Berit Kjdashah
o comunmente mal llamado Nuevo Testamento aun no existía para aquel entonces, por lo que no
podían estar hablando de otra cosa que no fuera la Torah). De modo que,
en base a esta evidencia, podemos concluir que la Torah aun tiene
validez, pues de otro modo no habría forma de saber que está bien y qué
es pecado.
Ahora bien, en cuanto a la palabra vajesed/gracia,
Wikipedia en español la define como “un favor o don gratuito concedido
por Elohe para ayudar al hombre a cumplir los mitzvot/mandamientos...”. Los términos ivrim/hebreos que usualmente se traducen como gracia son חן jen y חסד jésed. En Griego, gracia es comúnmente expresado como χαρις járis. Pudiera ser también traducido como favor. Ahora bien, si nos fijamos en el sentido de esta palabra, notaremos que el término vajesed/gracia no es un concepto pasivo, sino activo. La vajesed/gracia
no es algo que Yahweh otorga sin esperar un acto de nuestra parte; es
más bien un favor especial que nos capacita para poder hacer algo. ¿Y
qué es lo que nos permite hacer este favor? ¡Obedecer sus mitzvot/mandamientos!
En otras palabras, la vajesed/gracia
es el favor que Yahweh nos otorga, de modo que podamos vivir de acuerdo
a sus mitzvot/mandamientos; de acuerdo a su Torah. Existen varios ejemplos en
la Kitbé/Escritura que concuerdan con este entendimiento de la palabra vajesed/gracia. Por ejemplo, veamos Qorintiyim Alef/1 Corintios 12:4:
“Ahora bien, hay diversos dones; pero el ruaj/espíritu es el mismo.” (VIN)
En el verso anterior, la palabra traducida como dones es jarisma en Griego, de la raíz járis.
Este verso nos habla de los dones otorgados a los creyentes, los cuales
son simplemente favores para llevar a cabo ciertas tareas.
Otro ejemplo:
“El niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la vajesed/gracia de Elohe estaba sobre él.” Lucas 2:40 (VIN)
Éste verso está hablando de Yahshúa. ¿Qué clase de vajesed/gracia necesitaba Yahshúa? ¿Vajesed/Gracia para ser salvo del pecado? No, el sentido de vajesed/gracia en este verso no es otra cosa que el favor de Yahweh Elohe sobre él para llevar a cabo lo que le fue encomendado.
Por consiguiente, vajesed/gracia
debe ser entendido como el favor que otorga Yahweh a una persona para
poder hacer algo. En nuestro caso, es el favor que Él nos otorga para
vivir de acuerdo a su Torah. En cambio, rajem/misericordia es un acto de bondad hacia otra persona. Por lo tanto, vajesed/gracia y rajem/misericordia no son términos similares; ambos aluden a conceptos diferentes.
La relación entre vajesed/gracia y rajem/misericordia
Si bien los términos vajesed/gracia y rajem/misericordia no
son similares, sí es cierto que hay una relación entre ellos. Esta
relación no consiste en que sean términos similares en significado, sino
que ambos describen un proceso que cada creyente experimenta.
Cuando pecamos, es la rajem/misericordia
de Yahweh la que nos permite acercarnos a Él y encontrar perdón para
nuestros pecados. Sin embargo, una vez somos perdonados, es la vajesed/gracia de Yahweh la que nos capacita para poder vivir apartados del pecado. En otras palabras, la rajem/misericordia nos lleva al perdón de nuestros pecados, pero la vajesed/gracia
nos lleva a vivir apartados del pecado. Cuando entendemos ésto
claramente, entonces las palabras de Shaúl (Pablo) toman sentido en sí
mismas:
“ Así,
mientras el pecado reinaba trayendo muerte, el favor reina trayendo
justificación que redunda en vida eterna, gracias a Yahshúa el Mashíaj
nuestro Maestro.” Romanos 5:21 (VIN)
“¿Qué
concluimos entonces? ¿Permaneceremos en el pecado para que se aprecie
mejor el favor? ¡De ninguna manera! Porque los que hemos muerto para
efectos del pecado, ¿cómo vamos a vivir todavía en él?” Romanos 6:1-2
Lo
que nos quiere decir Shaúl en estos versos (y muchos otros más en los
cuales él expone este tema) es precisamente que, si hemos recibido el
perdón de nuestros pecados, hemos recibido su vajesed/gracia
también. Pero esta vajesed/gracia, contrario a lo que comúnmente se enseña, no
es una licencia para pecar y obviar la Torah. Al contrario, esta
maravillosa vajesed/gracia es el poder que nos otorga el Abba/Padre a través de su rúaj hakódesh (espíritu de santidad) para poder vivir una vida apartada del pecado.
De
modo que, si hemos recibido su vajesed/gracia, vivamos de acuerdo a su Davar/Palabra,
que no es otra cosa que su Torah. Su vajesed/gracia, dada a nosotros a través
de su ben/hijo Yahshua, nos capacita para vivir rectamente.
¡Bendito sea Yahweh, nuestro Elohe, quien a través de su vajesed/gracia nos capacita para vivir de acuerdo a su Torah!
shalom a todos.
Toda Raba, muchas gracias por sus comentarios. Estoy comenzando a aprender hebreo. Pero concuerdo totalmente respecto al cumplimiento de la Torah y de la Davar de nuestro Abba.
ResponderEliminarMe gustaría profundizar aún más estos temas.
Guardo el sábado y la ley de nuestro Elohe y creo en su ben Yashua.
Rubén Albornoz