NO ALIMENTEMOS EL PECADO

APRENDIENDO LOS CAMINOS DE LA TORAH DE YAHWEH

NO ALIMENTEMOS EL PECADO MIS AMADOS
En el mundo de hoy, el pecado no es un tema de moda. Lo que sí está de moda en nuestra sociedad es buscar la manera de absolvernos totalmente de la responsabilidad por nuestros actos. Los expertos suelen decir: “No se le puede hacer responsable de sus acciones, porque abusaron de él cuando era niño, etc, etc.” Lamentablemente, somos propensos a aceptar ciertas prácticas pensando que no puede ser tan malo si todo el mundo hace lo mismo.
Pero Yahweh va directamente al grano, y la Sagrada Escritura nos define claramente lo que es el pecado: “Todo aquel que comete pecado, infringe también la Torah/Instruccion; pues el pecado es infracción de la Torah/Instruccion” ( Yonahan Alef 3:4).

¿A qué ley se estaba refiriendo Yonahan? Lo aclara en otro pasuk de esta carta: “En esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mitzvot/mandamientos. El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mitzvot/mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él” ( Yonahan Alef 2:3-4). También escribió: “Este es el ahavah/amor a Yahweh, que guardemos sus mitzvot/mandamientos; y sus mitzvot/mandamientos no son gravosos” ( Yonahan Alef  5:3).

El pecado se define como el quebrantamiento de los mitzvot/mandamientos y las Instrucciones de Yahweh Elohe (LA TORAH).

¿Por qué debe preocuparnos el quebrantar las leyes de Yahweh?

¡Porque está en juego nuestra vida eterna! El shelukjim/apóstol Shaul advirtió:
“La paga del pecado es muerte” (Romaniyim/Romanos 6:23). Es fácil reconocer pecados como el homicidio, el hurto y el adulterio, pero Yahshua amplió el concepto del pecado al incluir hasta nuestros pensamientos, no sólo nuestras acciones. Nuestro Adon Yahshua dijo que la ira, el odio y la codicia, que son pensamientos y actitudes,  quebrantan los mitzvot/mandamientos en contra del adulterio y el homicidio, tanto como lo quebrantan los actos físicos mismos (Matihayah/Mateo 5:22, 28;  Yonahan Alef  3:15).

No hay nadie que no haya fallado: “Por cuanto todos pecaron, y
están destituidos de la gloria de Yahweh” (Romaniyim/Romanos 3:23). El shelukj Shaul describe nuestro estado natural, carnal, separados de Yahweh: “No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Yahweh . . . No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno . . . Sus pies se apresuran para derramar sangre; quebranto y desventura hay en sus caminos; y no conocieron camino de shalom/paz. No hay temor de Yahweh delante de sus ojos” (Romaniyim/Romanos 3:10-12, 15-18).

Ese que acabamos de leer ahí es el pecado impenitente, amados míos. Ese es el pecado peligroso. Cuando no hay temor de Yahweh, se pierde la capacidad de arrepentirse y de sentir la necesidad de obtener Su maravillso perdón. ¡Entonces sí este pecado conduce a muerte segura!
Barut Ata Hashem Yahweh y barut Yahshua Ha Mashiaj.