EL DEJAR TODO

Nuestro Amo Yahshua es quien UNICO nos puede perdonar pecados  y salvarnos,  y quien no cree en El ni en Su autoridad y poder  dados por Yahweh,  lamentablemente  no tiene quien lo perdone ni lo salve.    Ni le queda "sacrificio"  alguno que le sirva para purificarle y perdonarle.
Esto precisamente fue lo que le sucedió a nuestro pueblo del tiempo del Mashiaj Yahshua  cuandoparte de ellos lo rechazaron,  luego de haber oído su Besorat (Buena Noticia) y visto sus milagros.   No le creyeron.   No tuvieron de esa "emunah/fe que salva."    ¡Prefirieron y decidieron seguir viviendo "en el ANTES"!   
¡No les interesó aprender  nada "del DESPUES"!
Todos aquellos religiosos que predominaban en su tiempo  (y todos los ingenuos que los seguían a ellos empezando por el traidor y réprobo apóstol Judas)  no le creyeron que El era el Ben/Hijo de Yahweh y que como "Cordero sin tacha"  era el  UNICO sacrificio  que podía perdonarles sus pecados.  
¡O no les importó no creerlo!    Y cumplieron lo que dice en la  Sefer a los Ivrim/Hebreos, 10:26: ¡que ya  no les quedó mas sacrificio  por sus pecados!    ¡Se quedaron atrapados "en un callejón sin salida"!   ¡Un callejón que se llama "el ANTES"!
Amados,  "Sin emunah/fe,  no podemos agradar a Yahweh,"  ni podemos hacer sacrificios ni  obras que valgan;   porque para MOVERNOS  y para HACER,   ¡SE NECESITA TENER EMUNAH!    Y  también dice la Davar/Palabra que "la emunah viene  por el oír LA PALABRA."   ¡Y obviamente por creerla!. POR CREER  A  TODO  LO QUE  DICE ALLI. 
"La Palabra"  no solamente incluye el Tanakj,  amados ajim, ajotis y javerim; sino también los sefer/libros de los nabi/profetas,  además  los libros históricos que demuestran los cumplimientos iniciales de las profecías,  y los Sefer/Libros del  "Berit Kjadashá" o Pacto Renovado.  Ahí en esos libros vemos cumplida la promesa del Mashiaj o "ungido" de Yahweh  rescatando mediante la GRACIA (regalo) a ovejas perdidas de un pueblo caído,  y dándoles  perdón para salvación.
MIS AMADOS:
Todo eso es parte de nuestra EMUNAH "que nos salva" (o sea, de una fe bien cimentada, e inconmovible, en la Palabra Kodesh de Verdad).
Antes no la conocíamos, porque casi no la habíamos oído.  Amados,  así de "ignorantemente" y de vanamente vivíamos antes de haber sido "llamados,"  ¡cuando aún no teníamos  esperanza de salvación  alguna!   ANTES  éramos simples y viles descendientes de "Ahjola y Ahjolibáh"  y de sus relaciones inmundas  con sus amantes los gentiles.
Por eso nuestras obras  eran MALAS.   Eran "obras de la carne.",  pero ahora que  hemos oído y creído,  sabemos que  Yahweh Elohe nos ha mostrado Su vajesed/gracia  y nos ha tenido  rajamim/misericordia   y nos ha LLAMADO  a Su santo servicio.    Ahora hemos conocido a Nuestro Amo Yahshua y al propio Abba/Padre Kodesh Yahweh a quienes  "antes sólo conocíamos de a oídas"  y tenemos  razón para ESPERANZA.
Ahora bien;  arrepentirnos es muy importante  pero eso nadamás  no nos basta.  ESO NO  NOS  ES SUFICIENTE  COMO PARA DEJAR EL PECADO  TOTALMENTE ATRAS.   ¡Nos hace falta  algo mas  para poder  romper y salir  de ese "ciclo vicioso"  de "pecado, arrepentimiento y perdón"  en el cual  muchos "llamados"  permanecen demasiado tiempo (y hasta se llegan a desanimar),  y poder seguir y servirle a Nuestro Salvador Yahshua como El desea y espera de nosotros! 

¿Qué es lo que nos hace falta?(Yahshua y Sus apóstoles lo mencionaron).
Lo que nos hace falta es HACER,  amados ajim:  ¡Vivir por Su Palabra!    ¡OBRAR!   Tenemos que ir efectuando un cambio radical  de vida,  y cambiar  las cosas que queremos,  creemos y hacemos,  por cosas mucho mejores.   Tenemos que cambiar de  prioridades.  Tenemos que ser  KODESH o estar en SANTIDAD.  ¡Y eso significa vivir  apartados de todo lo  profano y contaminado!
Amados,  tenemos que irnos apartando de las cosas y de las personas que nos mantienen estancados  y que nos hacen seguir pecando de forma rutinaria y permisiva,  ¡aunque sean las cosas o las personas que mas querramos en este presente mundo!  
Yahshua lo dijo,  que si un ojo o un brazo nos hacía pecar,  había que sacarlo o cortarlo de nuestro cuerpo (Matt. 5:29),  y dijo también  en Matt. 10:37  que cualquiera que no sea capaz de dejar a su familia por El,   no es digno de El.
"El que ama su abba/padre o a su ima/madre más que a Mí,  no es digno de Mí;   y el que ama a su ben/hijo o a su bat/hija más que a Mí, no es digno de Mí."
Entonces  amados todos:   atender maridos,  esposas,  padres y madres,  e hijos o nietos,  claramente no debe de ser la prioridad  de ninguna persona "llamada."  Es un deber,  mientras ese deber no interfiera con el  deber MAYOR  que Yahshua nos ha encomendado.
NO PODEMOS  amar a nada ni a nadie,  MAS que a Yahshua,  ni obedecer a nadie MAS  QUE A EL.  Y El nos resumió toda la Torah en DOS GRANDES MITZVOT que El nos dió,  el primero de los cuales es:  AMARLOS a El y al Abba Yahweh con todas las fuerzas de nuestro lev/corazón;  y el segundo AMAR a nuestro prójimo tanto o mas como a nosotros mismos, ¡empezando por nuestros ajim en la fe!     Ahora vean lo que El añade en  Silas 14:26:
"Si alguno viene a Mí,  y no (es capaz de) aborrece(r) a su padre y madre,  a su mujer e hijos,  a sus hermanos y hermanas,  y aun hasta su propia vida,  no puede ser Mi discípulo."
O sea,  que todo lo que se interponga  entre nosotros  y aquello que represente  seguirlo y obedecerlo a El como El manda,  ¡hay que aborrecerlo!   ¡Hay que sacarlo de la  lista de prioridades!
Hay que tener todas esas cosas,  personas y bienes de este mundo,  como  "pérdida,"   y no aferrarnos a ellas.    Amados míos,  el apóstol Shaul lo dijo en su Sefer a los Filipiyim 3:7-8:  
"Todo lo que para  mí era ganancia,  lo he estimado como pérdida por ahavah/amor de Mashiaj ... y  digo aún más,  yo estimo como pérdida todas las cosas en vista del  incomparable  valor de conocer  a Yahshua Ha Mashiaj,   mi Amo,   por quien lo he perdido todo  y lo considero como basura,   a fin de ganar a Mashiaj."
Shaul  lo hizo.   Muchos otros lo hicieron y lo están haciendo.  ¿Y cuántos de Ustedes lo han hecho?   Yo también lo he hecho, y por eso les hablo y animo.