DISTINTAS CLASES DE AYUNO EN LA ESCRITURA
APRENDIENDO TORAH
DISTINTAS CLASES DE AYUNO EN LA ESCRITURA
(i) Estaba el ayuno que se relacionaba con el luto.
Entre la muerte y el entierro de un ser querido, los que estaban de duelo se tenían que abstener de carne y de vino.
(ii) Estaba el ayuno que se hacía para expiar un pecado.
Se decía, por ejemplo, que Rubén ayunó siete días por su
responsabilidad en la venta de José: «No bebió vino ni ninguna otra
bebida alcohólica; no probó la carne ni ninguna otra cosa apetitosa»
(Testamento de Rubén 1:10). Por la misma razón, «Simeón afligió su alma
con ayuno durante dos días, porque había odiado a José» (Testimonio de
Simeón 3:4). Por arrepentimiento por su pecado con Tamar, se decía que
Judá, en su ancianidad, «no tomaba ni vino ni carne, ni se permitía
ningún placer» (Testamento de Judá 15:4). Hay que decir que el
pensamiento judío no le veía ningún valor al ayuno si no iba acompañado
del arrepentimiento. El ayuno era la expresión externa de una aflicción
interna. El autor del Eclesiástico (31:30) dice:« El que ayuna para
librarse de sus pecados, y va y hace las mismas cosas otra vez, ¿quién
tomará en serio su oración, y de qué le servirá el humillarse?»
(iii) En muchos casos el ayuno era un acto de penitencia nacional.
Así ayunó la nación entera después del desastre de la guerra civil con
la tribu de Benjamín: Entonces subieron todos los hijos de Israel, todo
el pueblo, y fueron a la casa de Elohim. Lloraron, se sentaron allí en
presencia de Yhwh, ayunaron aquel día hasta la noche y ofrecieron
holocaustos y ofrendas de paz delante de Yahweh. (Jueces 20:26). Samuel
hizo que el pueblo ayunara porque se habían extraviado tras Baal: Los
israelitas se reunieron en Mispá, y allí sacaron agua y la derramaron
como ofrenda al Padre. Aquel día ayunaron y reconocieron públicamente
que habían pecado contra Abba Yahweh.
Allí, en Mispá, Samuel se
convirtió en caudillo de los israelitas. (1 Samuel 7:6). Nehemías hizo
que el pueblo ayunara confesando sus pecados: El día veinticuatro del
mismo mes, los israelitas se reunieron para ayunar; se vistieron con
ropas ásperas y se echaron tierra sobre la cabeza, (Nehemías 9:1). A
veces la nación entera ayunaba en señal de penitencia nacional delante
de Yhwh.
(iv) En ocasiones el ayuno era una preparación para recibir una revelación.
Moisés ayunó cuarenta días y cuarenta noches en la montaña: Moisés
entró en la nube, subió al monte, y allí se quedó cuarenta días y
cuarenta noches. (Éxodo 24:15). Daniel ayunó esperando la Palabra de
Yah: y dirigí mis oraciones y súplicas a Elohim, ayunando y vistiéndome
con ropas ásperas, y sentándome en ceniza. (Daniel 9:3). Yahshua mismo
ayunó esperando el enfrentamiento con el tentador:
Estuvo cuarenta días y cuarenta noches sin comer, y después sintió hambre. (Mateo 4:2).
Este era un principio sano; porque, cuando el cuerpo está más bajo
control, es cuando las facultades mentales y espirituales están más
alerta.
(v) Y a veces el ayuno era una llamada a responder a Yhwh.
Por ejemplo, si faltaba la lluvia, y había peligro de que se perdieran
las cosechas, se proclamaría un ayuno nacional para invocar la ayuda de
Yhwh.
En el ayuno de Israel había tres ideas principales.
(i) El ayuno era un intento deliberado de llamar la atención de Elohim.
Esta era una idea muy primitiva. El ayuno estaba diseñado para atraer
la atención de Yhwh y hacer que Se fijara en la persona que se afligía
voluntariamente.
(ii) El ayuno era un intento deliberado de demostrar que el arrepentimiento era auténtico.
El ayuno era la garantía de la sinceridad de las palabras y de las
oraciones. A la vista está que aquí había un peligro; porque, lo que se
suponía que era una prueba de arrepentimiento podía llegar a
considerarse un sustituto del arrepentimiento.
(iii) Mucho del ayuno era vicario.
No estaba diseñado para salvar el alma de una persona tanto como para
mover a Yhwh a salvar a la nación de sus angustias. Era como si los
especialmente devotos dijeran: «Las personas corrientes no pueden hacer
esto. Están inmersos en las tareas del mundo. Nosotros haremos este
extra para compensar la necesaria deficiencia de la piedad de los
demás.»
Que El Altísimo le bendiga en todo,
ResponderEliminarQuiero precisar que el versículo que indica el ayuno de Moisés es Exodo 34:28:
Exo 34:28 Y Moisés estuvo allí con el SEÑOR cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan ni bebió agua. Y escribió en las tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos.
Por lo demás un buen estudio. Gracias.